Hace ya muchos años, por casualidad, conocí a una cantautora gallega. Por aquella
época las redes sociales de hoy, no existían, y Olga Andrés tenía un foro, en
el que las que más escribíamos éramos la misma Olga, Rocío Pavón (aunque yo la
conocí, y la sigo conociendo, como Ro) y yo.
Conocí a Ro en persona en un viaje a Madrid para ir al Rincón del Arte
Nuevo a ver un concierto de Olga. Con el tiempo supe de la admiración de Rocío
por Ella Baila Sola y por Marta Botía y, junto con otra gente, un día recibí un
mail de Rocío contándonos que Marta le había escrito proponiéndole formar parte
de un nuevo proyecto siguiendo como secuela de Ella Baila Sola.
Se pusieron en funcionamiento y el resto ha sido la historia de EBS que
podéis encontrar en redes sociales y en su blog. De lo que se ha colgado en los
últimos días no voy a formar parte directa en facebook, así que uso este trozo
de mi “libertad” que tengo para dar mi humilde opinión sin conocer lo ocurrido
entre Rocío Pavón y Gonzalo Benavides y Marta Botía.
Primero: Tengo tatuado en el antebrazo izquierdo un trozo
de una canción de Ella Baila Sola escrita por Marta Botía, pero que esa canción
marcara mi adolescencia no significa que condicione mis acciones. Mis amigos
por encima y Rocío Pavón tiene todo mi apoyo si las cosas sucedidas la han llevado
a tomar la decisión de dejar de trabajar con Gonzalo Benavides, y aceptar las
consecuencias de ello.
Segundo: Facebook, o al menos un perfil público del mismo,
no es sitio donde decir ciertas cosas, ni en caliente, ni en plan
sensacionalista.
Tercero: Primero Ella Baila Sola, ahora EBS. En ambos Marta
Botía y Gonzalo Benavides. Eso da que pensar.
Cuarto: Espero que no se ponga en duda otra vez el carió
de Rocío Pavón hacia sus fans, porque tiene un corazón enorme. Y que dejen de
decir que es “la acompañante” de Marta Botía, porque Rocío brilla con luz
propia, sino buscar los singles de EBS…
