dijous, 23 d’agost del 2012

empiezo a despertar

Segundo café del día  y es ahora cuando empiezo a despertar.



Llegamos a casa agotadas de un día intenso y loque parece obvio, meterse en la cama y caer rendidas, no ocurre. Entre besos, caricias y charlas se nos pasan las horas y otra noche más, terminamos durmiendo menos horas de las que nuestro cuerpo desea. Pero al mismo tiempo cuadno estamos juntas nuestro cuerpo aguanta para disfrutar la una de la otra.

Conversaciones interminables. Risas por doquier. Besos. Caricias. Más risas. Sí, tengo sueño, pero como dicen: Sarna con gusto no pica.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada